Luego de la intensa jornada vivida en Punta Tombo,
retomamos la Ruta 3 en dirección Sur.
El destino esta vez fue Comodoro Rivadavia, Chubut.
Este tramo insumía muchos kilómetros, por lo que hicimos noche en una estación YPF del paraje Garrayalde luego de 180 klms.
Servicios muy completos y parada obligada
para camiones y vehículos livianos.
La noche fue muy tranquila,
cargamos combustible y agua en los tanques.
A la mañana seguimos viaje, 200 km. más
y llegamos a Comodoro Rivadavia.
En esta ciudad, en 1907, buscando agua se encontró petróleo
a más de 500 mts. de profundidad.
Este hecho, determinó un crecimiento comercial y demográfico fundamental para convertirla en la
principal ciudad de la Provincia de Chubut.
Mucho viento, calor y tráfico muy intenso.
Calles con subidas pronunciadas.
Dejamos ropa en un lavadero, y nos fuimos
rápidamente a Rada Tilly,
el balneario de la ciudad.
Buscábamos tranquilidad, quizás demasiado (mal) acostumbrados
a las solitarias playas que habíamos conocido.
En la costanera, nos costó encontrar lugar para estacionar.
Cuando lo conseguimos, enseguida llegó
el cobrador del estacionamiento medido.
Un joven muy agradable del interior de la provincia, que llegó a estudiar a Comodoro, en verano hace este trabajo temporario.
Esta playa de unos 3 km. de largo, arenas oscuras, se hace muy amplia en bajamar, pero con la marea alta llega hasta el murallón
y los veraneantes se instalan entonces en la vereda.
Lo interesante es que la playa está delimitada
por los típicos acantilados patagónicos.
Decidimos dejar Comodoro Rivadavia y Rada Tilly,
y viajar hasta Caleta Olivia.
Dejamos así Chubut, y entramos en Santa Cruz.
Iniciamos entonces un viaje bordeando el mar.
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